Energia

Hace apróximadamente  4 años que mi vida cambio casi por completo. Hacía tiempo que tenía una opresión en mi pecho, como si hubiera alguna cosa que tenía que hacer, pero no sabía que era, me lo pregunte muchas veces a mi misma, hasta que encontré el camino correcto,( no se si lo busque o vino a mi),  ahora después de 4 años sigo caminando, no tengo metas, ni planifico el futuro, solo vivo el presente, el momento de ahora mismo, las cosas, los cambios fluyen por si solos.
El huerto me ha dado una felicidad que no imaginaba, tengo mucho trabajo y acabo rendida, pero me surge una energía que no puedo explicar, algo me empuja a seguir adelante, y yo no me resisto.
Me siento feliz, equilibrada, motivada y todo esto me lo da el huerto.
Siento que estoy ayudando al planeta, al medio ambiente, al entorno, a las personas. Todo el huerto es ecológico, y procuro sembrar todo lo que me gusta, y sobre todo hortalizas que van a desaparecer si no nos preocupamos de plantarlas  en nuestros huertos.

He podido comprobar con gran ilusión, que todas las variedades nuevas de tomates han encantado a las personas que los han probado, y me insisten que siga cultivandolos, y esto junto con los comentarios que dicen, me hacen sentir que voy por el buen camino:  Planto  variedades poco conocidas para ofrecer  a personas de mi entorno, es un alimento sano y nutritivo, y yo me siento feliz al ver que contribuyo aunque sea en pequeña escala a cuidar nuestro mundo.

Un caso de verdad

He tenido suerte de conocer a una persona que me ha explicado su caso, y esto me ha hecho pensar mucho.
Esta persona tenía una enfermedad crónica, para la cual se medicaba y hacía controles y pruebas para controlarla, llevaba una vida que no le gustaba,  más que no le gustaba era que no la aceptaba,  estaba con una persona que la quería, pero ella no se sentia bien, le gustaba su compañia pero eso era todo, sentia que quería vivir otra vida, ni mejor ni peor pero diferente, mientrás todo esto pasaba por su cabeza, su enfermedad se hacía latente, hasta que un día vio la luz del camino que debía tomar, cambio varias cosas en su vida, todas las que no aceptaba, al poco de este cambio me explicaba que se sentía muy bien, incluso fue dejando poco a poco la medicación, ahora han pasado varios años, y la enfermedad crónica parace haber desaparecido, ya no se médica, y es feliz.
Es como si su cuerpo la estuviera empujando a cambiar las cosas, la hacía sentirse mal, incluso con una enfermedad. Ahora no tiene miedo a volver a encontrarse mal porque al ser feliz, todo fluye bien y no hay razón para que el cuerpo proteste.
No creo que todos los casos de gente que tiene enfermedades tiene que ser por razones similares, pero el de esta persona parece que si.
Nuestro cuerpo es muy inteligente y sabe como avisarnos.

INVISIBLES

Hace tiempo vi en TV un reportaje de esta película, y en estos días he podido ver la película-documental entera.
Hay personas que no saben lo que son los derechos humanos, se les han negado y tienen que convivir con gente que no les respeta, que les hacen daño hasta tal punto que más es imposible, sus vidas no valen nada, porque como dice el titulo son invisibles.
Y lo triste es ver que los culpables siempre son los mismos: El ejercito, los presidentes, la policía, todos son corruptos y viven rodeados del maldito dinero, en lugar de procurar que la gente del pueblo pueda trabajar, viviendo en familia, y morir dignamente cuando llegue su hora, solo piensan en tener más y más dinero, todo para ellos, y como se creen tan superiores abusan de mujeres, matan niños, padres, madres........ son .... sería demasiado fuerte la palabra , no la digo, pero seguro que quién lea esto sabrá lo que quiero decir.
Desde aquí quiero felicitar a todas las personas que hacen posible que no sean invisibles, que les ayudan y nos muestran los horrores de sus vidas, y por otro lado como el dolor les da fuerza para luchar y no rendirse.